sábado, 6 de junio de 2015

Mamá UP

Al fin nos vamos a casa y eso significa que comienza lo bueno. Aparte del tamiz neonatal (Es un estudio que identifica a los recién nacidos con alteraciones del metabolismo), era necesario realizar otros estudios a Emiliano para corroborar la trisomía. La realidad es que de 20 características que tienen las personas con síndrome de down, El solo presentaba 8 y según su pediatra la Dra. Aranza Rangel ( una chilanga-regia en Cancún) en un grado ligero. 

Ya para ese día, nosotros (Javier, mi mamá y yo) ya habíamos investigado hasta lo que no, tipos de trisomía, si tenía el dedo de la abuela, el ojo rasgado del tío, la lengua larga del vecino etc etc; todas ellas rasgos claros del síndrome del down. 

"Tienen que hacer un estudio de genes (cariotipo*) ", es la única forma de saberlo. [Dra. Aranza] 
Con todo el dolor de mi corazón, imaginen que tenían que sacarle por goteo todo un tubo de sangre a un bebe de menos de  15 días  de nacido, yo en la lloradera justo a fuera de donde toman la muestra, no queriendo ver, y peor aun escuchar.

El estudio tardaría aproximadamente unos 20 días en llegar, ya que no se realiza en algún laboratorio local; no me crean mucho pero creo que hasta EUA se va la sangre. 

Con esto nos relajamos un poco, la verdad no es que no aceptáramos a Emiliano, pero la gente lo ve y nos dice "¿están seguros?, pero si no le noto nada", así que pues a uno le entra la duda, y no comentaríamos nada  hasta obtener los resultados. 

Dios no se equivoca, y manda respuestas en el momento preciso. 

Justo habían llegado mi papá y mi suegra para conocerlo cuando me llaman del hospital. "Sra. De Chávez, sólo para informarle que tenemos un previo del estudio que le hicieron a Emiliano, si gusta puede pasar por el" y en ese momento deje de respirar. 

Le llame a Javier para que en ese momento fuera. No sabia que decir ni que hacer. 
Solo recibí una foto, si esa, que hace que todo cambie, que hace que el corazón se paralice. 


Pedí a mi mama que saliera del cuarto. Yo en mi cama, abrazada a Emiliano, nuevamente llorando en silencio. 
No sabia que llegaría tan pronto el momento.
Me sentía tan llena de sentimientos.
Quería una respuesta de Dios.

Y entonces la obtuve. 

Emiliano abrió sus ojos, pidió de comer. Puse sus labios en mi pecho, y como un acto de amor nos fundimos en uno solo. 

Yo había llegado a este mundo para ellos (Javier y Emiliano) y ellos para mi. 
Nos habíamos elegido desde siempre para estar juntos. 

En ese momento, me convertí en lo que soy: UNA MAMÁ UP. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario